Con casi 200,000 personas evacuadas como resultado del incendio, San Francisco ha abierto un refugio temporal para desastres para ayudar a las personas que han sido desplazadas.
Los subsidios ayudan a abordar el atraso de adultos mayores y personas que viven con discapacidades que esperan una vida asistida subsidiada debido al alto costo de la atención.
El programa ofrece entrada gratuita de verano a museos locales e instituciones culturales para los residentes de San Francisco que reciben beneficios públicos.